
Encuentro con Gorosito…
Daniel Gorosito Pérez
TODOROV: “LA LITERATURA PUEDE AYUDARNOS A VIVIR”
- Partilhar 01/02/2022

Este 2022, se cumple un
quinquenio del fallecimiento en febrero del
2017 del semiólogo, escritor e historiador,
de origen búlgaro, Tzvetan Todorov. Nació en
1939 en Sofía, en el 2008 recibiría el
Premio Príncipe de Asturias de Ciencias
Sociales. Fue profesor de la Escuela de
Altos Estudios de París, de las
universidades de Harvard,
Yale y Berkeley entre otras y director del
Centro de Investigaciones sobre las Artes y
el Lenguaje.
Cada uno de sus libros,
significaba una oportunidad para profundizar
en el conocimiento ya sea de la literatura o
la historia y de los problemas y retos a los
que se enfrentan las sociedades
contemporáneas.
En la trilogía: Los
enemigos de la democracia, el miedo a los
bárbaros y La tentación totalitaria,
advertía Todorov sobre las dificultades para
la convivencia en las sociedades
multiculturales, y analizaba en profundidad
los peligros que amenazan a los sistemas
democráticos en tres manifestaciones
concretas: el populismo, el mesianismo y el
ultra liberalismo.
Advertía también el
escritor sobre el poder de los medios de
comunicación masiva que anteponen su impacto
mediático a sus responsabilidades
informativas.
Según Todorov todos
los totalitarismos prometen convertir a los
hombres en artistas, liberarlos de las
cargas de la vida y desplazar su atención
hacia la creación. Aunque sobre los poetas
sentenciaba: “El poeta fracasa
inevitablemente en todas las otras vías de
realización: habituado, acostumbrado (por él
mismo) con el absoluto, exige de la vida lo
que ésta le pueda dar”.
Decía que la
poesía no debe someterse a la búsqueda de la
verdad y del bien porque es en sí misma
portadora de una verdad y de un bien
superior a los que encontramos fuera de
ella.
Sobre la creación y el ser
humano consideraba que para unos serán las
máquinas las que se encargarán de abolir las
fronteras entre el arte y la industria,
liberando al hombre de los trabajos pesados.
Para otros el arte y la cultura ya no
serán placer de unos pocos sino la felicidad
y la vida de las masas. Para Todorov fueron
las vanguardias artísticas que florecieron
durante el periodo entre las dos guerras
mundiales las que crearon inconscientemente
el germen de los totalitarismos, haciendo
perder también el sentido de la vida que el
semiólogo encuentra en la literatura:
“A
veces los escritores, y también los críticos
y los profesores, olvidan que la gran
vocación de la literatura es hacer sentido
de nuestra vida, y la encierran en un
ejercicio estéril, puramente formal”.
Los totalitarismos, movimientos
revolucionarios en Europa nacen en Italia,
Alemania y Rusia, tres países que serán
testigos del desarrollo de las principales
vanguardias artísticas.
Con respecto
a la literatura Todorov externa: “Si hoy me
pregunto por qué amo la Literatura, la
respuesta que me viene a la cabeza de forma
espontánea es: porque me ayuda a vivir”.
“Ya no le pido tanto como en la
adolescencia, que me ahorre las heridas que
podría sufrir en mis encuentros con personas
reales; más que excluir las experiencias
vividas, me hace descubrir mundos que se
sitúan en continuidad con ellas y me
permiten entenderlas mejor”.
“Más
densa y más elocuente que la vida cotidiana
pero no radicalmente diferente, la
Literatura amplía nuestro universo, nos
invita a imaginar otras maneras de
concebirlo y organizarlo”.
Considera
que el conocimiento de la literatura no es
un fin en sí, sino una de las grandes vías
que llevan a la realización personal. La
literatura más densa y más elocuente que la
vida cotidiana, pero no radicalmente
diferente, nos invita a imaginar otras
maneras de concebirlo y organizarlo.
La finalidad de la literatura es
representar la existencia humana, pero la
humanidad incluye también el autor y a su
lector. No puede abstraerte de esa
contemplación, porque el hombre eres tú, y
los hombres son el lector. Por más que
hagas, tu relato es una charla entre tú y
él.
La literatura puede hacer mucho.
Puede tendernos la mano cuando estamos
profundamente deprimidos, conducirnos hacia
los seres humanos que nos rodean, hacernos
entender mejor el mundo y ayudarnos a vivir.
No es que sea ante todo una curación del
alma, pero en cualquier caso, como
revelación del mundo, puede también de paso
transformarnos a todos nosotros desde
dentro.
No tengo dudas que como lo
afirmaba Tzevetan Todorov: “La literatura
puede ayudarnos a vivir”.
¡Hasta el próximo encuentro…!
Dr.(c). Washington Daniel Gorosito Pérez
- n.33 • fevereiro 2022